29.5.06

Pero... ¿es real o no?

La típica frase que surge al hablar de lucha libre con gente que no es aficcionada es la típica "¿Pero no es todo de mentira?" " No se pegan de verdad" "Es falso"

Tradicionalmente siempre se intentó que la gente que no perteneciera al mundo de la lucha no conociera hasta qué punto es o no es predeterminado, pero con la llegada de internet y de los panfletos informativos como wrestlingobserver, eso es ya imposible.

Así pues, no hace falta investigar mucho para saber que las peleas tienen un resultado predeterminado y que los luchadores colaboran los unos con los otros para hacer un espectáculo digno. Cualquier persona sabe que la mayoría de las peleas reales no duran más de un minuto y que si a una persona le dan un buen puñetazo, es difícil que se recupere lo suficientemente rápido antes de que se echen encima de él. Y, desde luego, no muchos serán capaces de volver a pelear al día siguiente.

Una vez que ya sabemos que los resultados de las peleas se deciden de antemano y que los luchadores no entran al ring para matarse unos a otros, podemos preguntarnos por qué seguimos viendo un "deporte falso". Ahí van unas cuantas posibles razones.

1. Capacidad física: Los luchadores no tratan de hacer daño a los contrarios, pero nadie les quita sus dosis de dolor. A pesar de que la lona rebota ligeramente, las caidas duelen, hay muchos golpes de los que es muy difícil protegerse y los luchadores no siempre son capaces de ser lo bastante precisos como para no golpear al oponente. Por eso es admirable la capacidad física para aguantar ese dolor.

2. Talento: Una pelea en una superproducción de Holywood no es muy diferente de lo que podemos ver en un combate de lucha libe, pero hay un dato que los hace totalmente distintos. En una película se realizan montones de tomas desde muchos ángulos (y luego está la postproducción). En el wrestling todo tiene que salir bien a la primera. Los luchadores son como los especialistas del cine de acción, pero en directo y trabajando más veces por semana.

3. Aspecto episódico: Las historias se continuan. El wrestling es como una telenovela, pero enfocada más al público masculino.

4. El bien contra el mal: Todas las películas, todas la historias, todos los libros se basan en el concepto del bien contra el mal. En todas las grandes sagas hay un bueno y un malo. Esto es normalmente la base del wrestling. Un bueno contra un malo. Los espectadores pagan para ver cómo después de trampas, artimañas e interferencias, el bueno consigue vencer al malo o pierde demostrando un esfuerzo heróico. A todo el mundo le gusta animar al bueno y abuchear al malo.

5. Interacción con el público: En la mayoría de los deportes, el público es un mero espectador. En la lucha libre el público es el rey. La reacción del público es la que decide a la larga si los luchadores que están viendo son madera de cabeza de cartel (main event) o si tendrían que estar en el primer combate de la noche. El público decide a quien abuchear y a quien animar, haciendo muchas veces que los buenos se conviertan en los malos y los malos en los buenos...

6. No se acaba: La liga de fútbol se termina en Junio, los programas de lucha libre se emiten todas las semanas del año.

7. Las Divas: Seamos sinceros. ¿A quién no le gusta ver a señoritas ligeras de ropa de vez en cuando?

En fin, es un cruce entre una película, una serie que se continua y una retransmisión deportiva. Podemos razonar perfectamente nuestra afición por la lucha libre.

1 comentario:

justin sanchez dijo...

talvez sea falso perola wwe es lo mejor